Un Padre de familia falleció en un incendio en el sector, La Colorada del Municipio de Mara, cuando ya había salvado del fuego a su hija de 9 años, a su hijo mayor de 11 años y a su suegro.

El lugar de la desgracia se encuentra en Maracaibo capital del estado Zulia, en Venezuela.

Helí Saúl Bravo Muñoz, de 33 años de edad, agricultor y comerciante, se despertó a media noche alertado por el vigilante de la granja, encontrándose rodeado de humo y fuego en los pasillos de su casa. Saco por la ventana a ambos niños y regreso a buscar a su mujer y a su hija menor. De paso ayudo a su suegro a salir por una ventana. Se dirigió a buscar  a su mujer e hija, las que habían salido por otra ventana con ayuda del vigilante de la hacienda.

Bravo Muñoz, cayó en la habitación que ya estaba en llamas y no pudo respirar, pereciendo en el lugar. La casa se encontraba a las afueras de la ciudad, lo que significó que la llegada de bomberos no fuera rápida. El vigilante y un tío que llego a ayudar, optaron por investir con su camioneta a la casa para tratar de llegar hasta el padre de familia, que aún estaba en el interior. Siendo estéril esta maniobra. Al llegar bomberos ingresaron hasta la casa en llamas, encontrando al padre fallecido y su cuerpo calcinado.

Según las pericias preliminares de bomberos, se presume un cortocircuito, producto de un teléfono celular conectado a un enchufe cargándose.

En breves palabras el suegro relato: “Él nos sacó a mí, a Juan, y a la niña por una ventana de atrás y nos dijo que nos quedáramos allí, porque había fuego por todos lados”. Y regresó a buscar a su esposa e hija”. “No sabemos qué le pasó que no volvió a salir. No se podía entrar por el humo y el fuego en todos lados”, dijo Isaías Bravo, suegro de Helí Saúl.

Según trascendió en medios locales, el vigilante de la granja, se percató de las llamas, quien dio aviso de inmediato a bomberos y corrió a ayudar a la vivienda.

Hasta el momento, la hija menor se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos en una clínica de Maracaibo. Su esposa está bajo observación, con lesiones internas a nivel del esófago, producto del humo caliente inhalado.

El hijo varón, la otra niña y el suegro resultaron ilesos, gracias a la valiente intervención de Helí Saúl al rescatarlos.