El completo es una variación chilena del sándwich norteamericano llamado “perro caliente” hecho de pan de mesa y vienesa, acompañado de aderezos.

El “Hog Dog” es una creación de principios del siglo XIX en los Estados Unidos y llegó a Chile  en 1920, de la mano de un trabajador chileno, que laboro en el país del norte en un restaurante de venta de “Hog Dog”. Eduardo Bahamondes regreso a Chile y abrió un negocio de fuente de soda en el Portal Fernández Concha en Santiago.

El Hog Dog consistía en una vienesa en pan de mesa acompañado de mostaza y kétchup.

El Quik Lunch, fue el primer local en vender el completo chileno, la especialidad de este local era la variedad de Sandwich, popularizándose rápidamente por sus ricos y novedosos panes. A esto se le agrego los nuevos aderezos que fueron furor en el sector de la plaza de armas de Santiago, el ketchup y la mostaza que acompañaban a la reina de las ventas el Hog Dog.

Posteriormente se les agrego la mayonesa, más luego se fue perfeccionando concretamente a la idea chilena, chucrut, tomate, palta, cebolla y perejil, ají entre otros ingredientes. A gusto de los comensales el completo se difundió con extremo éxito en todo Santiago.

Tal era la victoria de este producto entre los santiaguinos que la idea del completo  fue copiada por otros locales del sector, generosos en las ganancias para los dueños de los locales y generosos en el sabor para los ansiosos solicitantes. Fue así  como nació el Nuria de calle Huérfanos. Y en 1952 en la calle Agustinas 1064, abrió sus puestas el Dominó. Pronto se extendió a todo el país con tremendo éxito,  además del sabor se le agrego el invaluable sentido del servicio rápido, Usted lo pide y en 4 minutos los tiene frente a usted.

Pues bien el rico completo nunca falta en el cumpleaños, en la kermese del colegio, en la once del día domingo, para apagar el hambre por las tardes, completadas para juntar dinero, en las juntas de amigos, en las reuniones familiares y tantos más.

Y por supuesto el rico y ansiado completo de nuestros cuarteles no tiene parangón.

No hay mejor completo que el del cuartel, mañana, tarde y noche, al contado a al lápiz, por comer algo rico, o por hambre, después de una emergencia o antes de una.

El completo es tradicional en todo momento, van juntos como el casco y las botas, el completo del cuartel y los bomberos, imposibles separarlos.

Ahora el kétchup, la mostaza, el pancito, vienesa la mayo casera, y a celebrar el día del completo.