Septima Compañia de Bomberos
“Bomba España”
Valparaíso
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La gran fiesta de Navarra y por ende de toda España, que trae consigo una popularidad increíble en todo el mundo, es la fiesta de San Fermín, la que comenzó este día sábado 6 de julio a las Doce del día, con el lanzamiento del célebre chupinazo y terminara el próximo día 14 a las 00.00 horas. Esto con la entonación de la tradicional canción “Pobre de mí”, como última actividad. La ciudad de Pamplona capital de Navarra, se viste de fiesta para estos días y su principal y más conocida actividad son los encierros, que consiste en una carrera de unos 879 metros, por algunas calles, siendo el punto de partida la Cuesta de Santo Domingo, pasando por el Ayuntamiento, Mercaderes, Estafeta, la Telefónica, Callejón y termina en la Plaza de Toros. La corrida es de 6 toros bravos, (que serán lidiados por la tarde) y de 6 cabestros o mansos, los que corren calle abajo detrás de los participantes, que parten corriendo primero, esta carrera culmina en la plaza de toros. Los encierros tienen lugar todos los días que dura la fiesta, justo cuando el reloj marca las 08.00 horas. Poco antes de esta horas señalada, se canta a San Fermín para implorar ayuda. La corrida tiene una duración aproximada de 3 minutos y medio. En los emocionante y excitantes encierros, los participante de visten de blanco, con pañuelo rojo al cuello. Esta celebración tiene su origen en la época medieval, cuando a la llegada del verano se realizaba una fiesta comercial, con el tiempo fue progresando, llegaron los ganaderos de toda la región, con corridas de toros. Hacia 1591 la gran fiesta se incorporó oficialmente calendario, el encierro de la época significaba el ingreso de los pastores de toros a Pamplona. Estos venían desde los campos de la Ribera de Navarra hasta la entonces Plaza Mayor, lugar de destino. En la mañana siguiente temprano, hacían entrar corriendo a los toros al corral, ayudado por los hombres a caballo. A fines del siglo XIX se pasó de correr detrás de ellos, a correr delante, luego con el pasar del tiempo, se transformó en lo que son hoy en día las corridas. Además en esa época, en estas fiestas se celebraba con campeonatos de danzas tradicionales regionales, pregones, batallas simuladas de lanzas. Canticos y buena comida. A principios del siglo pasado se implantó el lanzamiento del “Chupinazo” que es un cohete artificial, lanzado tradicionalmente por el alcalde de Pamplona. Dentro de las festividades, Además de los encierros, actualmente se lleva a cabo el “Riau-Riau”, se reúnen frente Ayuntamiento para bailar el vals del mismo nombre. También hacen de las suyas los impresionantes kilikis y zaldukis, gigantes elaborados de cartón, madera etc., Muy bien terminados con detalles artísticos de alta calidad, van por las calles seguidos de los gaiteros y txistularis (flauteros), tocando música y levando el compás de la comitiva. También al caer la noche hay fiesta de fuegos artificiales, mientras que grupos danzarines bailan el Zubigainekoa. También hay grupos para bailar danzas tradicionales como Lesaka, Expatadantzaris, el Zubigaireko, o la Ziarkakoa, todas estos bailes se ofrecen al Santo. La variada y rica gastronomía tiene su espacio los bares de pintxos, ofrecen sus mejores ofertas, los churros con chocolate caliente son sobresalientemente exquisitos, tanto así, se forman filas para comprarlos. Para finalizar, ¿Quién fue San Fermín? Según se sabe, San Fermín era hijo de un importante romano de Pamplona, por allá por el siglo III. Se convirtió al catolicismo como sacerdote, realizando trabajos de educación para los trabajadores, además convirtió a muchos paganos a la religión, falleció torturado y degollado. Este santo es quien protege a los corredores, esto se le llama “capotico de San Fermín”. Según la tradición católica, protegió a la ciudad de Pamplona de varias epidemias que mermaron las poblaciones cercanas.
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