Este día lunes 7 de diciembre, se realizó en el salón de honor de la Compañía, la tradicional cena de fin de año, acompañado por nuestras esposas, las que están especialmente invitadas. Esta cena es exclusivamente para agasajarlas y reconocer abiertamente su apoyo y comprensión.

Digno de un buen caballero séptimo, es reconocer y destacar a aquella esposa que tras  “bambalinas” nos alientan, nos entienden y se complementan con su aporte personal, al entender y compartir este mundo bomberil.

A diferencia de las demás actividades que se desarrollan en este mundo,  el bombero voluntario no tiene días libres, no marca la entrada o salida de su quehacer, no existe diferencia entre fines de semanada, pascua, vacaciones o reuniones familiares. Y ante esto, siempre existe la comprensión y el entendimiento por lo que hacemos por parte de nuestras esposas, las que apoyan y alientan para seguir adelante.

No es fácil y requiere de un noble corazón de mujer, ese mismo corazón que es madre y esposa a la vez.  Nuestras esposas saben del amor, conocen mejor que nadie lo que significa un sacrificio por los demás. Saben que el bien mayor de ayudar a los demás, es en sí un acto de amor, que se complementa por gestos y acciones.

Tal vez  no es casualidad que la cena, donde festejamos a nuestras esposas por su apoyo y comprensión, se realice en el mes de diciembre. Justo cuando nuestro corazones se encuentran pretorito de espíritu navideño, con amor y fraternidad. Esa enseñanza que el niño Jesús nos legó.

Con una rosa entregada a cada una de nuestras esposas al comienzo de la cena, se dio por iniciada la velada.  A las 21.30 horas el señor Director, don Miguel Aguilar Alveal, dio comienzo a la cena en honor a ellas, con unas sentidas palabras de agradecimiento a nuestras infatigables compañeras.

Asistieron a la cena,  el señor Superintendente de la institución Don Miguel Sánchez Paniagua y su Señora esposa. Lo mismo la presencia del Secretario General Germán Arcos Galaz y su señora.

Grato y distinguido fue contar con la asistencia del Señor Carlos Tortuero Martin,  Consejero de Empleo y Seguridad Social de la Embajada de España en Chile y de su Señora,  Doña. María Jesús Moriano de Tortuero.

La cena fue éxito en el sentido de la gran concurrencia para expresar reconocimiento y  propicio para estrechar lazos entre las damas asistentes, intercambiado vivencias, emociones y pareceres.

La cena finalizo como es costumbre con la entonación del Himno de la Compañía, y reiterando nuestro más absoluto reconocimiento a nuestras esposas, por su constante apoyo.