Ayer 120 pasajeros de un avión, fueron salvados por el capitán de la aeronave que maniobro su aparato en una enorme lluvia de granizos que triso el parabrisas y destruyo la  parte delantera del avión.

El capitán ucraniano Aleksandr Akopov, de la aerolínea turca “AtlasGlobal”, bajó a la pista del Aeropuerto Internacional Ataturk, de Estambul, luego enfrentar una severa tormenta de granizos. A pesar de tener trisados el parabrisas, condujo la nave a la pista aterrizando por poca visibilidad. Fue recibido como verdadero héroe por el personal de tierra y los pasajeros aseguraron que fue todo un héroe, nunca perdió el control y la calma.

Bomberos del aeropuerto se dispusieron a enfrentar un escenario catastrófico, con antelación se solicitó la concurrencia de ambulancias y apoyo externo de bomberos de la ciudad.

La tormenta llevo consigo una lluvia de granizo del tamaño de pelotas de golf, que además de azotar el avión, también dejo estragos en la ciudad, dañando gran cantidad de vehículos, rompiendo vidrios de edificios y casas y derribando a muchos árboles. Las personas debieron correr para protegerse de las verdaderas “piedras” que cayeron. Los centros de asistencia médica recibieron a muchas  personas heridas por esta causa.